Este año, el volumen de las exportaciones del cereal superó en 1.400.000 toneladas al de todo el año pasado, y la superficie de área sembrada se incrementó en 1 millón de hectáreas.
Según el informe oficial, en lo que va del año ya se exportaron más de 5,6 millones de toneladas de trigo, mientras que el año pasado, en el mismo período, se habían vendido al exterior 2,6 millones de toneladas.
A su vez, las autoridades esperan un incremento de un millón de hectáreas de las áreas sembradas, en el curso de este año y el próximo, hasta totalizar una implantación de 5,3 millones de hectáreas.
El crecimiento de las exportaciones y la confianza de los productores para apostar por el trigo son «consecuencia directa de la rebaja de los derechos de exportación, la eliminación de los cupos de ventas al exterior y la recuperación de mercados históricos como Brasil, Egipto y el sudeste asiático», agregó el informe.