La difícil situación que atraviesan las distintas producciones agropecuarias en la Argentina quedó ayer una vez más evidenciada con un nuevo informe de la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR) en el que anticipa un panorama más que desalentador para la próxima siembra del denominado maíz temprano, y los últimos guarismos que confirman que la campaña triguera será una de las peores de los últimos 50 años, según publicó El Cronista.
La Guía Estratégica del Agro (GEA) de la entidad rosarina alertó que las encuestas a productores de la región núcleo la más rica en términos de tierra y rendimientos de los cultivosde la cosecha gruesa dan cuenta de una «disminución drástica» para la siembra del maíz, que comienza en menos de dos meses, en la que proyectan una caída de 40% interanual. «El poco entusiasmo para producir se evidencia en las escasas ventas de insumos para el maíz hasta la fecha», señala la BCR, que recuerda que ya el año pasado se había dado una baja en el área destinada al cereal, que compite cuerpo a cuerpo con la soja en las preferencias de la gruesa.
El desalentador pronóstico se suma a la realidad del trigo: a menos de dos semanas para que termine la «ventana ideal» de siembra, en la zona núcleo falta implantar un 10% del área estimada, «y se va consolidando una reducción de 35%» en las hectáreas destinadas al grano en esa región.
La situación de ambos cereales, los más perjudicados durante los últimos siete años por las trabas a las exportaciones a través de cupos de Roes; con caídas en los valores internacionales en torno al 25% anual; y costos elevados (por inflación acumulada, precios internos planchados y presión tributaria récord), así como la incertidumbre política electoral, sintetiza el malestar de cientos productores, que hoy saldrá a las rutas para reclamar cambios inmediatos y radicales en las políticas sectoriales.
A esos se suman las situaciones de quebranto en las economías regionales, con las frutas rionegrinas a la cabeza, y los tamberos que trabajan a pérdida por la baja en los precios aplicada por la industria, entre otras de las tantas actividades perjudicadas. «La ecuación no cierra por donde se la mire», resumen los dirigentes.
En el séptimo aniversario del «voto no positivo» del entonces vice Julio Cobos a la resolución 125, y bajo el paraguas de la convocatoria nacional de tres de las gremiales de la mesa de enlace, ruralistas de al menos 11 provincias realizarán asambleas, concentraciones a la vera de las rutas y volanteadas para decir «No maten al campo».
Dos días después de que el Gobierno anunció la ampliación de beneficios para pequeños productores de trigo, maíz, girasol y soja; y subsidios para tamberos por tres meses más, bases y filiales de Federación Agraria (FAA) participarán de la jornada de protesta, a pesar de que su conducción, encabezada por Omar Príncipe, no adhirió.Las concentraciones y asambleas se darán en distintos puntos de las provincias de Buenos Aires, La Pampa; Santa Fe; Entre Ríos; Córdoba; Tucumán; Salta; Santiago del Estero; Chaco, San Luis y Tierra del Fuego.
Los presidentes de Sociedad Rural (SRA), Luis Etchevehere; de Confederaciones Rurales (CRA), Rubén Ferrero; y de Coninagro, Egidio Mailland, encabezarán desde las 10 la movilización que se desarrollará en Gualeguaychú, Entre Ríos, a la altura del kilómetro 57 de la autovía 14.
Por la tarde, los tres dirigentes visitarán la concentración de productores que desde las 13.30 se realizará en Villa María, Córdoba; en el acceso a la autopista Córdoba-Rosario y la ruta provincial 158.
Fuente. Infocampo.com.ar