Hace una semana, se contactó con el museo para donar unos libros. Bajo una observación atenta, detectó que uno era de la āCasa Ottavianiā de Ing. White y otro del Aniversario 93 del pueblo en 1978. AhĆ, encontró notas sobre distintas instituciones: los Bomberos, los clubes HuracĆ”n y Comercial, los Scouts, el Hospital Menor e incluso, una nota sobre la construcción del polo petroquĆmico titulada āUn sueƱo largamente esperandoā. AsĆ, supo que podĆa ser importante conservarlos y, tras el llamado telefónico, fue el museo en busca de ellos.
Tal vez -ademÔs de ser importantes por su información histórica- los libros sean la excusa para que el museo llegue a su casa, converse con Gabriela, escuche su historia.
Eso, salir a caminar por las calles de White y conversar, tambiƩn es hacer un museo comunitario.