Esta definición ocurre tras varios meses de discusión y negociación entre las partes. El 31 de marzo pasado, Preska había fallado en contra de la Argentina en el juicio que le había iniciado el fondo Burford Capital por la estatización de YPF. Tras ocho años de litigio, determinó que la Argentina -y no la empresa- debía pagar una indemnización tras argumentar que los demandantes tenían derecho a una sentencia sumaria por incumplimiento de contrato.
Respuesta del Gobierno argentino
Gabriela Cerruti, portavoz presidencial, comunicó a través de Twitter que “el gobierno argentino apelará inmediatamente el fallo de la jueza Loretta Preska”. Dijo que el presidente Alberto Fernández “analizó la cuestión con la Procuración del Tesoro”, y que seguirán defendiendo “la soberanía energética y nuestra empresa estatal YPF frente a los fondos buitres”.
¿Cómo fue la expropiación de YPF?
En el año 2012, el gobierno argentino llevó a cabo la expropiación del 51% de las acciones de YPF, que pertenecían a la compañía española Repsol. La decisión fue tomada por la entonces presidenta, Cristina Fernández de Kirchner, quien expresó que el objetivo era que el Estado controlara la empresa para garantizar la autosuficiencia energética del país.
El empresario argentino buscó tomar distancia del escenario electoral, mientras sube la tensión de cara a las elecciones generales de octubre
YPF acordó un financiamiento en dos tramos para potenciar la producción de combustibles ultra bajos en azufre en las refinerías de La Plata y Luján de Cuyo
La expropiación se llevó a cabo al declarar a YPF como una empresa de utilidad pública sujeta a expropiación.
La operación no estuvo exenta de polémicas y generó una crisis diplomática entre Argentina y España, ya que el gobierno español consideró esta acción como una agresión a sus intereses. Por su parte, el gobierno argentino argumentó que Repsol no había invertido lo suficiente en YPF y que no había cumplido con los compromisos para aumentar la producción. Como parte de la expropiación, Argentina indemnizó a Repsol con US$5.000 millones.
Fuente: Bloomberg.