El grupo italiano Enel tiene intenciones de construir una nueva central de ciclo combinado para proveer al sistema energético argentino de otros 400 MW de potencia. La decisión del conglomerado dueño en Argentina de la distribuidora Edesur y de Central Costanera, fue informada ya al Gobierno por los ejecutivos locales que ahora esperan la respuesta oficial.
De ser aprobado el proyecto, la nueva planta se levantará en el mismo predio donde ya operan Central Costanera, rebautizada Enel Generación Costanera y que se encuentra en plena Ciudad de Buenos Aires, en la zona de Costanera Sur, detrás de Puerto Madero y en la zona portuaria porteña.
El plan de Enel contempla una inversión de u$s 400 millones y un plazo de construcción de dos años, según pudo saber El Cronista de fuentes de la propia empresa. El ingreso a pleno funcionamiento entonces dependerá del tiempo que se tome el Ministerio de Energía para aprobar la iniciativa, aunque en el holding estiman que si el visto bueno llega este año, la nueva central de generación de electricidad podrá entrar en operaciones en 2019.
Si bien no se conocen mayores detalles, el proyecto se ubica entre los presentados ante una convocatoria lanzada por el ministerio de Energía y Minería de la Nación, donde se decidirá su futuro y el de numerosos proyectos para obras de infraestructura electro-energética que contribuyan a la reducción de costos en el Mercado Eléctrico Mayorista (MEM).
Una vez concluido el análisis de las propuestas, el Ministerio a cargo de Juan José Aranguren deberá determinar los proyectos prioritarios y se confeccionará un pliego licitatorio con el fin de convocar a competencia a todos los interesados en los mismos durante el primer semestre de este año. Como todo proceso licitatorio, se procederá luego a la evaluación de las ofertas, su potencial adjudicación y la firma de los contratos respectivos en el curso de 2017 para la construcción y operatividad comercial de cada proyecto integral.
En el caso del proyecto de Enel, el grupo italiano busca expandir sus actividades en este sector en América latina, incluyendo Argentina, Brasil, Perú y Colombia, países donde Enel Américas, controlante de la filial argentina, está presente en negocios de distribución y generación eléctrica. En el caso local sus ejecutivos creen que, luego de los años de congelamiento de tarifas y de freno a las inversiones, el cambio de clima y de gobierno les permite mirar al país como un mercado atractivo para sumar proyectos. De hecho, Enel había puesto en cero el valor de todos sus activos en el país, luego de los años de gestión kirchnerista, mientras que ahora miran el mercado con objetivos de nuevas oportunidades para invertir parte de los u$s 7500 millones que el holding italiano comprometió para la región.
En el caso de la nueva planta generadora de energía, Enel busca complementarla con Generación Costanera, la mayor compañía de energía eléctrica vía procesos térmicos de Argentina con una planta de seis unidades de ciclo convencional a vapor, con una capacidad instalada de 1138 MW de potencia y dos unidades de Ciclo Combinado, la primera de ellas de 327 MW de potencia y la segunda de 859 MW de potencia bruta ISO configurada por dos turbogeneradores a gas y un turbogenerador a vapor. Actualmente produce el 7,9% de participación en la potencia instalada total del Sistema Argentino de Interconexión (SADI).
Fuente: Cronista.