¡Qué rápido pasa todo! Una noticia deja lugar a otra, y a otra, y a otra, y a otra. A veces, de un día para el otro. A veces en minutos.
Pero también hay noticias fundamentales hechas de lentitud y de mucha paciencia. ¿Se acuerdan que en abril de 2024 la lancha “La Nueva Lucía” fue traslada desde Puerto Piojo en un carretón para ser emplazada con una grúa en el frente del Museo del Puerto?
Desde entonces se fueron sucediendo, en distintas etapas, diversos trabajos destinados a cuidarla, a mejorarla, a ponerla linda otra vez.
Los vecinos y pescadores Enrique Russo y Herminio Onorato, junto al equipo del museo, dieron los primeros pasos en enero regando las maderas y encarando tareas de masillado.
Hace dos meses “Beto” Conte y Aroldo Fiorito acomodaron con dedicación maderas y resolvieron detalles de la cabina.
Y en estas últimas semanas, siempre con el acompañamiento de la Delegación Municipal y los aportes del Consorcio de Gestión del Puerto, vecinos y pescadores de las lanchas Santa Ana y San Adrián, como Mathias Cavero, Darío “Palmiro” Gómez, Esteban “Peque” Hernández, Alejandro Onorato, Claudio Onorato, Emanuel Onorato, Joel Eric Onorato, Jonathan Onorato, Ezequiel Seijas, Héctor “Pocho” Seijas y los niños Maximiliano Onorato y Gabino Césari se levantaron a las cinco de la mañana para aprovechar las horas frescas y agarraron los pinceles para pintarla de amarillo y rojo, con detalles en negro, en blanco, en azul.
Miren cómo quedó. A veces lo urgente es lo menos urgente.
¿Cómo se agradece todo este trabajo colectivo, todo este afecto, toda esta dedicación? ¿Cómo se agradece casi un siglo y medio de pesca artesanal?





