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En vísperas de la celebración de San Silverio, la presidente del Centro Laziale de Bahía Blanca, Elsa Amor, graficó las sensaciones más profundas y significativas que generó una nueva procesión y el homenaje al santo patrono de los pescadores y la comunidad.
«Como todos los años es un momento muy esperado. La población y los pescadores esperan todo el año la procesión, la ofrenda en el mar y esta ceremonia hermosa. Ese color rojo y el símbolo nos conmueve a todos los fieles. Se cumplieron 95 años de la llegada de la imagen y es emocionante todo el tiempo que pasó», comentó Elsa.
«Recuerdo todas las procesiones. Mi mamá estaba embarazada y desde la panza me llevaba al puerto. Mi familia es toda de pescadores y siempre se dedicaron a la actividad. Me acuerdo las bombas que sacudían la iglesia en los primeros años y la fiesta con la que se vivía en todo el pueblo esta fecha», destacó.
«Este aniversario lo viví con alegría por lo multitudinario que fue el evento. En estos años se acercó mucha gente, sumado a la difusión y el apoyo del Consorcio del Puerto. Hay movimiento desde temprano y el evento tiene mucho colorido. Se le dio otro matiz más fuerte y eso generó mucho movimiento de público», celebró Elsa.
