Así, la inflación nacional se ubicó por debajo de la medición de CABA que fue del 2,5% el mes pasado, pero que, paralelamente, compartieron la tendencia a la baja de la «core». Cabe remarcar además que, según el REM que publica el Banco Central, la suba general de precios iba a estar en el orden del 1,8%. De esta forma la inflación aceleró por segundo mes consecutivo, pero manteniéndose por debajo del 2%.
«Las vacaciones de invierno y el cobro del aguinaldo tienden a impulsar al alza categorías como recreación y cultura (+4,8%) y restaurantes y hoteles(+2,8%), que se sumó a los aumentos en frutas y verduras. Los regulados jugaron en el mismo sentido, con aumentos en transporte, colegios, prepagas, tarifas de luz, gas y agua, comunicaciones, entre otros», señaló sobre el impulso al alza del IPC.
Pero en contraste, resaltó que la núcleo presentó una desaceleración respecto al mes pasado (+1,7%) y se ubicó en 1,5%, «en un contexto donde los salarios reales se mantienen prácticamente estancados desde el comienzo del año, lo que, junto con la apertura de importaciones, impone un techo a los aumentos». De cara a agosto, desde Eco Go apuntan a una inflación del 2%, con «un pass-through limitado».
A su turno, Tobias Pejkovich Balbiani, economista de Facimex, analizó en diálogo con Ámbito este dato: «La gran noticia es que la inflación núcleo alcanzó mínimos desde noviembre de 2017 al ubicarse en 1,5%, desacelerando 0,2pp contra junio. A diferencia de mayo-junio donde los Estacionales jugaron muy a favor, en julio se vieron mayores presiones vinculadas a las vacaciones de invierno (estimamos que Paquetes turísticos subieron 9,6% y Hoteles 8,6%), a la vez que hubo una reversión parcial en Frutas (+5,1%) y Verduras (+6,3%) que acumulaban tres meses consecutivos con deflación«.
Según este experto, si se agrega un poco de perspectiva al IPC, en los últimos tres meses la inflación estuvo por debajo del 2% mensual con un promedió el 1,7% (22% en términos anualizados), esto refleja que «la velocidad crucero de la inflación está en mínimos desde fines de 2017».
«Concretamente, si se dejan de lado los precios estacionales y los precios regulados, la inflación núcleo, es decir, la que contiene precios que no son estacionales ni regulados, fue del 1,5%, menor a la de junio (+1,7%), a su vez menor a la de mayo (+2,2%), a su vez menor a la de abril (+3,2%). En otras palabras, la tendencia a la reducción de la inflación como proceso económico sigue sin interrumpirse«, expresó Gastón Utrera, director del Instituto de Economía Política de Insight 21, think tank de Universidad Siglo 21.
Por último, Clara Alesina, economista de la Fundación Libertad y Progreso, para el mes en curso proyectó estabilidad para la primera semana, mientras que «para todo el mes se prevé un IPC cercano al 2%, quizás apenas por encima». «La clave estará en cómo maneja la liquidez el BCRA y lo que pueda absorber el Tesoro en las licitaciones de deuda«, agregó.
Fuente: Ambito