El Ćŗltimo informe de Ecolatina acerca del turismo internacional, realizado a principios de este aƱo, describĆa la mejora del saldo del turismo internacional durante 2014. Se dijo ahĆ que por primera vez desde la imposición del cepo cambiario, la salida de argentinos al exterior se habĆa equilibrado con el ingreso de extranjeros a nuestro paĆs, en contraste con aƱos anteriores.
Sin embargo, nuestras perspectivas respecto de 2015 eran cautelosas. El gobierno descartó en un año electoral aplicar una devaluación como la de 2014.
De hecho, el Ejecutivo recurrió al financiamiento externo para profundizar el atraso cambiario, manteniendo la suba el tipo de cambio oficial por debajo del alza de precios.
Para peor, producto de la apreciación mundial del dólar, las demĆ”s monedas del mundo han exhibido devaluaciones significativas, como en el caso del real brasileƱo, que con una suba acumulada de 21% en 2015 alcanzó su mĆ”ximo en doce aƱos (3,36 BRL/USD). Es por ello que se espera para esta temporada invernal un menor arribo de turistas brasileƱos al paĆs.
Esto ha llevado a que los incentivos a viajar al exterior recobren fuerza, y que Argentina vuelva a ser un destino turĆstico caro (salvo que se liquiden divisas en el mercado informal para aprovechar la brecha cambiaria).
De hecho, en los primeros datos del 2015 muestran que se estancó el turismo receptivo y nuevamente crece la salida de argentinos al exterior, profundizando el déficit de viajeros internacionales.
A nivel divisas no se observó un deterioro significativo en el primer trimestre del aƱo respecto del mismo perĆodo de 2014: segĆŗn el Balance de Pagos (INDEC, criterio base devengado) el rojo del turismo internacional se redujo US$ 170 millones, pero aumentó US$ 250 millones segĆŗn el Mercado Ćnico y Libre de Cambios (BCRA, criterio base caja).
Atraso cambiario
DespuĆ©s de un sustancial saldo negativo entre el ingreso de turistas extranjeros y la salida de argentinos al exterior en 2013, la situación mejoró el aƱo pasado al punto que se volvĆa a una situación de virtual equilibrio.
En 2014, por primera vez en diez aƱos, la Encuesta de Turismo Internacional (ETI) del INDEC registró que en la cantidad de argentinos que viajaron al exterior por medio de Ezeiza y Aeroparque se habĆa contraĆdo (-4,4% anual).
Mientras que el ingreso de extranjeros al paĆs se habĆa expandido tras dos aƱos de caĆdas consecutivas (+3,4% anual). Incluso el dĆ©ficit del turismo en divisas se habĆa moderado sustancialmente.
No obstante, los datos de la primera mitad del año muestran una reversión de la mejora lograda en 2014.
En primer lugar, la diferencia entre la entrada y la salida de turistas por vĆa aĆ©rea volvió al terreno negativo entre enero y mayo de este aƱo (-166.200), superando el rojo exhibido en los primeros cinco meses de 2014 (-103.653), pero aĆŗn por debajo del dĆ©ficit de viajeros observando en igual perĆodo en 2013 (-186.900).
Por su parte, el déficit del gasto por turismo que arroja el ETI se moderó, pasando de US$ -361,7 millones a US$ -243,2 millones.
Por un lado, las erogaciones de los extranjeros en el paĆs cedieron 5,3% durante los primeros cinco meses de 2015, US$ 67 millones por debajo de igual perĆodo del aƱo pasado.
Por el otro, entre enero y mayo el gasto de los turistas argentinos en el exterior se redujo 12,1%, un promedio de US$ 230 menos por argentino. Esto se condice con menores autorizaciones a la compra de dólar turismo por parte de la AFIP, cuyo detalle veremos mÔs adelante.
De todas maneras, existen discrepancias entre los ingresos de divisas por turismo registrados por la Encuesta de Turismo Internacional (ETI) y el Balance de pagos del INDEC respecto de las estadĆsticas del Mercado Ćnico y Libre de Cambios (MULC) que compila el BCRA.
Las cifras del INDEC se basan en encuestas del gasto de los viajeros extranjeros y locales, mientras que el MULC registra la entrada de divisas sólo vĆa el mercado formal, dejando afuera aquellas operaciones hechas en canales alternativos.
En base a ello es que, cuando la brecha cambiaria se incrementa, tambiĆ©n lo hacen los incentivos de los turistas extranjeros a liquidar sus dólares en el mercado paralelo, atraĆdos por un tipo de cambio mĆ”s alto.
En el primer trimestre del año, con una brecha cambiaria que promedió 44,7% (en contraste con el 61,4% de los últimos tres meses de 2014), el ratio de divisas liquidadas en el mercado formal contra el gasto declarado por turistas alcanzó 47% mejorando levemente respecto del cuarto trimestre del año pasado (38%), pero aún por debajo del cociente observado en los primeros tres meses de 2014 (54%).
Para peor, la brecha cambiaria ha vuelto a expandirse en el Ćŗltimo mes, producto de la escalada del dólar blue. Esto significa que los próximos resultados de la ETI y del MULC probablemente arrojen nuevas caĆdas en la proporción de dólares de turismo que ingresan vĆa el mercado formal.
En segundo lugar, el consumo con tarjeta de crĆ©dito en dólares (que durante 2014 habĆa disminuido 33,5% promedio anual a causa de la reducción de la brecha cambiaria), volvió a ganar dinamismo este aƱo. En lo que va de 2015, las compras con tarjeta en el exterior repuntaron 57,4% i.a., aunque sin volver a los niveles rĆ©cord de 2012 y 2013.
MĆ”s aĆŗn, este aƱo viene dĆ”ndose un fenómeno atĆpico. Los gastos con tarjeta de crĆ©dito en moneda extranjera vienen mostrando elevados niveles de correlación con la brecha cambiaria desde la imposición del cepo.
Sin embargo, los consumos de este aƱo se han mantenido elevados y estables, a pesar de que la brecha venĆa cayendo desde finales de 2014 (aunque comenzó a recuperarse nuevamente desde mediados de junio), en respuesta a las menores autorizaciones de la AFIP a la compra de moneda extranjera para viajar.
Por caso, el número de solicitudes de compra de dólar turismo (se entregan dólares billete al tipo de cambio oficial mÔs un recargo del 35%) crecieron 1,8% i.a. respecto del primer semestre de 2014, pero el monto de dólares otorgado fue 18,9% menor.
En los primeros 28 dĆas de julio, la cantidad de operaciones superó al mismo mes cerrado de 2014 (+15,4%), pero el monto de dólares entregados cayó 6,3% (US$ 1.360 contra US$ 1.100 por persona).
El incremento en la demanda de dólar turismo (vĆa gasto con tarjeta o por medio de solicitudes a la AFIP) responde a la incertidumbre cambiaria asociada a la llegada de un nuevo presidente.
El mercado ve que el frente cambiario se encuentra tensionado, lo cual lleva a anticipar consumos expresados en moneda extranjera.
Por ejemplo, la compra de pasajes de avión, que puede realizarse en cuotas denominadas en pesos y que van perdiendo peso a medida que pasa el tiempo, gracias a la elevada inflación.
A ello se le suma la recuperación de los salarios, tanto en pesos como en dólares.
El poder adquisitivo del sector registrado acumuló un leve repunte en el primer semestre, mejora que se verÔ potenciado tras los incrementos acordados en paritarias (especialmente en dólares).
Esto da lugar no solamente a la recuperación del turismo emisivo, sino también al local.
Perspectivas para la segunda mitad del aƱo
Para lo que queda del 2015, las perspectivas respecto del turismo internacional no son buenas.
El hecho de que la brecha cambiaria estĆ© trepando implica que el ingreso de divisas vĆa turismo volverĆ” a canalizarse a travĆ©s del mercado paralelo, por lo que el Banco Central no percibirĆ” estas divisas.
AdemĆ”s, la inminencia de las elecciones (y de una alteración en las polĆticas monetarias y cambiarias despuĆ©s de los comicios con la asunción de un nuevo presidente) presiona sobre la salida de divisas por el pago anticipado de gastos asociados al turismo extranjero.
Por último, esperamos un deterioro del turismo receptivo en un contexto de profundización del atraso cambiario local (la inflación interna supera la depreciación del tipo de cambio oficial) sumado a la fuerte apreciación del dólar a nivel internacional.
Un peso mĆ”s dĆ©bil desalentarĆa la salida de argentinos, mientras que harĆa que el paĆs vuelva a ser un destino atractivo para los turistas internacionales, pero no prevemos una devaluación este aƱo.
De todas formas, las perspectivas para el turismo son mƔs favorables si incluimos el movimiento interno.
Los datos de ocupación hotelera muestran un crecimiento del 2,2% i.a en las pernoctaciones durante los primeros 5 meses del aƱo. La mejora de la ocupación del turismo interno (+5% i.a.) mĆ”s que compensó la menor estadĆa de extranjeros (-6% i.a.).