La Organización Mundial de la Salud (OMS) volvió a recomendar ayer que las personas que viajen a Brasil en los próximos dĆas se vacunen contra la fiebre amarilla. Lo hizo luego de que se detectara un aumento de la transmisión selvĆ”tica del virus cada vez mĆ”s próxima a centros urbanos muy poblados, como el Gran San Pablo.
En nuestro paĆs, el Ministerio de Salud de la Nación mantiene las recomendaciones vigentes desde el aƱo pasado (ver infografĆa). La vacuna debe aplicarse por lo menos 10 dĆas antes del viaje, en especial si el itinerario incluye visitar Ć”reas naturales. Quienes ya la hayan recibido, no deberĆ”n volver a aplicĆ”rsela. Una sola dosis de la vacuna aprobada por la OMS protege de por vida.
Si una persona infectada viaja a un Ć”rea metropolitana con presencia del mosquitoĀ Aedes aegypti, podrĆa comenzar el ciclo de transmisión urbana. El dengue, el zika y la fiebre chikungunya comparten vector con la fiebre amarilla.
Pero, por ahora, los funcionarios de la Organización Panamericana de la Salud (OPS/OMS) que monitorean la actividad del virus en la región estÔn concentrados en la fase de transmisión silvestre, especialmente en Brasil.
En los seis Ćŗltimos meses, hasta el viernes pasado, se confirmaron 358 epizootias en cuatro estados del sudeste de Brasil. La mayorĆa (90%) fue en el estado de San Pablo, mientras que el resto ocurrió en el de Mato Grosso (0,3%), RĆo de Janeiro (0,7%) y Minas Gerais (9%).
Ayer, las autoridades sanitarias brasileƱas confirmaron que hubo 20 muertos en lo que va del aƱo. Como anticipó LA NACION, fueron 11 en el estado de Minas Gerais, cuatro en el de San Pablo, tres en el de RĆo de Janeiro, una en el de BahĆa y otra en Brasilia.
AdemĆ”s se estĆ”n estudiando 687 epizootias en otros 17 estados, incluido el distrito federal, y 92 infecciones en residentes o visitantes de 15 estados: BahĆa, EspĆritu Santo, GoiĆ”s, ParanĆ”, Pernambuco, ParĆ”, Santa Catarina, ParaĆba, RĆo Grande del Norte, PiauĆ y Tocantis, ademĆ”s de los cuatro estados mĆ”s comprometidos.
Sylvain Aldighieri, director adjunto de emergencias de la OPS/OMS en la ciudad de Washington, explicó que, desde el punto de vista geogrÔfico, «lo mÔs preocupante es que las grandes regiones metropolitanas estÔn rodeadas de epizootias, incluida la ciudad de San Pablo. EstÔn ocurriendo muy cerca de una alta concentración de población, donde aún estÔn en curso las campañas de vacunación. En este momento, lo importante es lograr una cobertura suficiente para evitar todo riesgo».
Con experiencia mundial en la investigación de epidemias, Aldighieri precisó ayer a LA NACION que la recomendación para tomar precauciones se aplica especialmente «a todo el trayecto desde Corrientes, en la Mesopotamia argentina, y por los ingresos al estado de ParanÔ. Hay que estar protegido antes de acercarse a zonas selvÔticas».
Fuente: La Nación