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La «devaluación más anticipada de la historia» en la que ya trabaja el equipo de Cambiemos y que se aplicaría días después de iniciar la nueva gestión, no solo impacta en la industria y en las empresas de consumo masivo, sino que se prevé un fuerte impacto en el sector de turismo.
En ese marco, las agencias de viajes se subieron a la tendencia de aplicar aumentos «por las dudas» en sus paquetes promocionales, previendo un dólar oficial a entre $12 y 14 pesos.
Las subas se detectan sobre todo en los viajes al exterior, y se suman a otras medidas definidas por el sector, como el freno a la venta de pasajes en la Argentina que aplicaron empresas como American Airlines y Air Canada en los últimos días.
El otro punto central es saber qué ocurrirá con las cuotas. Algunas empresas las mantienen al contar con acuerdos con bancos, y otras las redujeron o directamente las eliminaron.
En los últimos días los precios de los paquetes crecieron entre un 20% y un 30%, según pudo relevar El Cronista. «La devaluación siempre fue una probabilidad pero hoy ya es casi un hecho y, así como muchos particulares se adelantaron a esto y compraron con anticipación para evitar este movimiento, con los operadores pasó algo similar y decidieron reacomodar los precios», explicó al matutino Pablo Singerman, director del Observatorio Económico de la Federación Argentina de Agencias de Viajes y Turismo (Faevyt).
Alejandro Valls, director de la agencia de turismo online Atrápalo, reconoció los aumentos, aunque dijo que la firma optó por dejar de lado esos proveedores: «Los que venían con subas no los tomamos para evitar inconveniente».
Las empresas se volcaron a una política de «trabajar ya con el valor que se estima alcanzará la cotización del dólar en poco tiempo».
«Es la forma que tenemos de evitar perder dinero; sino una vez que varíe la paridad cambiaria nuestra situación será muy compleja», dijo una de las fuentes consultadas por el diario. Para muchos, incluso, estas subas podrían continuar en los primeros meses del año.
A la compleja situación monetaria se suma el impacto que esta incertidumbre podría traer entre los propios turistas. «El mercado está un poco errático ya que muchos se encuentran a la expectativa de lo que ocurrirá. A veces pareciera moverse bien, pero por momentos también se cae», se quejó uno de los principales referentes del negocio mayorista.
«De 100 reservas que tenía hace un par de semanas hoy tengo 15», ilustró.
Fuente: Iprofesional.
