Luego de su visita especial al Club Comercial, Roberto Romano, hijo del mítico Isaías, compartió en nuestra emisión radial de los sábados por La Brújula 24, un resumen de lo que dejó la recorrida por nuestra localidad y la entidad verdiamarilla.
«Es como volver al lugar donde uno nació. Si bien yo soy de Buenos Aires, me genera una profunda emoción. Cuando puedo, siempre quiero volver porque me embarga una emoción impresionante. La calidez, la empatía. Estuve en 2018 con Luisa y ahora pude venir con mi hijo Tomás. Tuvimos un recibimiento extraordinario», sostuvo.
«Durante mi estadía pude ver las obras, recorrer el predio. Compartimos una cena espectacular y charlas emotivas, llenas de alegría y que realmente reconfortan», remarcó Romano.
«Mi viejo me contaba cuentos, historias, partidos. Entrar a la cancha me emociona porque es como estar jugando con mi papá. Y encima hacerlo acompañado de mi hijo es increíble. Es conmovedor verlo siempre con su estatua resguardando a Comercial», destacó Roberto.
«Si tengo que decir una de tantas anécdotas, me quedo con lo que me enseñó sobre la importancia de seguir una pasión. En su momento, él había recibido el llamado de Racing pero ya había dado su palabra para jugar en Boca. Esa es la enseñanza. Y veo que Comercial, dentro de ese paísito que es White, inculca eso a los chicos», concluyó.





