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El sábado pasado, en la cocina del museo, se llevó adelante un encuentro de lecturas macarrónicas: un almuerzo en el que, además de comer, se leen textos sobre comida. Participan integrantes de talleres de escritura del museo de distintas generaciones junto a poetas del Festival de Poesía Latinoamericana de Bahía Blanca.
Los talleres de escritura se llevan adelante en el museo desde 2017. Participan vecinas y vecinos de Ingeniero White adolescentes y mayores que se acercan a experimentar con la palabra y escribir relatos y poemas en relación al mundo de la cocina.
En octubre, se encuentran con poetas de distintos puntos del país y de América Latina que forman parte del Festival de Poesía que ya lleva 13 ediciones en nuestra ciudad.
El sábado, cada comensal se sumó a la consigna: compartir un poema sobre cocina o comida. Hay quienes también se animaron a cantar. Ese mediodía, versiones locales de un poema de William Carlos Williams se mezclaron con la Zamba de mi esperanza. Mia Arcuri, de15 años, leyó por vez en público un poema suyo que decía:
Manzana
Discutíamos y gritábamos
su cara estaba roja
y radiante como el sol
Ella era
agradable pero fuerte
lisa y robusta
Hablaba sobre otra manzana
una anterior, más refrescante
una supuestamente mejor
¿Por qué sos crujiente por fuera
pero blanda por dentro?
¿Por qué tratás de igualar
tu rojizo fuego al de los demás?
