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El presidente Mauricio Macri comenzó una nueva etapa en su estrategia política. Mientras la economía no le da buenos resultados en un año electoral, salió a atacar a sus adversarios políticos con fuertes declaraciones.
En el reportaje con Luis Majul en América apuntó en primer lugar a Cristina Kirchner, quien “le echa la culpa a los demás de las cosas que hizo”. Además, dijo que cree que “no está bien, es una persona que niega la realidad”.
Como suele ocurrir, la expresidente es su rival preferida para confrontar. Pero en este caso también se refirió a uno de los temas de la semana pasada, la salud de Florencia. Dijo que “Cristina no cuidó a los hijos, los involucró en las cosas que hizo”. Y también aseguró que “no ayuda con sus visiones arbitrarias, con su realismo mágico”.
Por otro lado, se diferenció de Cristina por el video que ella publicó esta semana, y dijo que él no quiso “hacer uso político de la muerte de mi padre”.
Críticas a su padre
Eso le dio pie a otro de los temas álgidos de la noche, ya que sostuvo que tuvo una relación “muy intensa” con Franco y que el duelo “recién comienza”. También dijo que siente “orgullo por el padre que tuve”, pero lanzó una acusación muy fuerte. Dijo que su padre «era parte de un sistema extorsivo del kirchnerismo, en que para trabajar había que pagar” y que “es un delito lo que hizo mi padre”.
Igualmente, lo usó a su favor, ya que explicó que permitieron “que se investigue como se tiene que investigar”. Y aseveró que “hoy se puede investigar a la familia del presidente, antes no”.
En relación con Roberto Lavagna, quien podría llegar a ser su rival en las elecciones de octubre, tampoco escatimó críticas.
Dijo que “debería tener más humildad” y que “estuvo en todos los gobiernos anteriores”.
También dijo que tendría que hacer una “autocrítica” y que “su renegociación de la deuda fue malísima”.
Otro de los dardos que le lanzó fue que “puso las retenciones al campo”, a pesar de que el propio Macri el año pasado volvió a reforzar ese impuesto.
Fuente: El Cronista
