Llevar una alimentación saludable es fundamental para la vida de las personas y la salud mental. Una mala alimentación puede acelerar el deterioro cerebral, mientras que un estilo de vida sano ayuda a preservar la memoria y la concentración.
Según los especialistas, dietas como la mediterránea, que son ricas en vegetales y aceite de oliva, aportan beneficios cuantificables a nivel cognitivo. De esta manera, se evidencia que el envejecimiento no es un proceso irreversible ligado únicamente a la edad, sino que puede modularse mediante hábitos saludables.
La combinación de alimentación equilibrada, ejercicio físico y entrenamiento cognitivo demostró ser eficaz, especialmente cuando la intervención es temprana.

Llevar una alimentación saludable es fundamental para la vida de las personas y la salud mental.
Qué nutrientes son esenciales para el cerebro
La nutricionista Eva Bautista asegura que los alimentos ricos en antioxidantes, ácidos grasos esenciales y vitaminas específicas mejoran la circulación cerebral y protegen las células nerviosas del envejecimiento prematuro.
Entre los nutrientes más importantes para mantener la memoria y la concentración se destacan:
- Antioxidantes: protegen las células cerebrales del daño oxidativo.
- Ácidos grasos omega-3: esenciales para la función cognitiva y la prevención de enfermedades neurodegenerativas.
- Vitaminas E y C: favorecen la regeneración neuronal y el flujo sanguíneo al cerebro.
- Ácido fólico y proteínas: promueven la reparación celular y el mantenimiento de la función cognitiva.

Los mejores alimentos para fortalecer la memoria
- Frutas y verduras: arándanos, frutillas, naranjas, brócoli y espinacas aportan antioxidantes y vitamina C, fundamentales para la salud cerebral. Se recomienda consumirlas frescas en ensaladas o acompañando otros platos.
- Pescados grasos: salmón, caballa y atún son ricos en omega-3, que mejoran la memoria y la concentración. Se aconseja incluir pescado azul en la dieta al menos dos o tres veces por semana.
- Frutos secos: almendras, nueces y avellanas contienen grasas saludables, antioxidantes y vitamina E, ideales para proteger las células cerebrales. Pueden consumirse como snack o en yogures y ensaladas.
- Cacao y chocolate negro: con alto contenido de flavonoides, favorecen la circulación cerebral y estimulan funciones cognitivas. Unos 28 gramos de chocolate al 85% de cacao o cacao puro en bebidas puede mejorar el rendimiento cerebral.
- Legumbres: lentejas, garbanzos y legumbres aportan ácido fólico, fibra y proteínas, esenciales para la regeneración neuronal. Incorporarlas en guisos, sopas o ensaladas ayuda a mantener la función cognitiva.
- Aceite de oliva virgen extra: rico en antioxidantes y grasas saludables, mejora la circulación sanguínea y reduce la inflamación neuronal. Se recomienda usarlo para ensaladas, aderezos y cocinar al horno.
Fuente: Ambito